Aumento del precio del oro: ¿Hasta dónde puede aprovechar la ola de aversión al riesgo?

El oro está viviendo un momento - nuevamente - y las razones no son nada sorprendentes. A medida que las tensiones globales se intensifican y la incertidumbre económica nubla las perspectivas, los inversores hacen lo que siempre han hecho en tiempos de turbulencia: buscar refugio en el refugio seguro más antiguo del mundo.

Esta semana, el oro (XAU/USD) subió más del 2%, recuperándose de mínimos recientes cerca de $3,200 para cotizar por encima de $3,320. El movimiento no es nada sorprendente. Entre puntos críticos geopolíticos, política comercial errática y mercados nerviosos, el oro demuestra una vez más que prospera en el caos.

El oro se acerca a máximos históricos por preocupaciones geopolíticas

Gran parte de la demanda reciente está impulsada por el volátil panorama geopolítico. El conflicto entre Rusia y Ucrania sigue sin resolverse, con el presidente Vladimir Putin declarando que Rusia tiene los medios para llevar la guerra a una "conclusión lógica" mientras anunciaba una tregua a corto plazo. 

Mientras tanto, Oriente Medio está al borde del abismo, tras un ataque con misil balístico al Aeropuerto Ben Gurion de Israel por parte de rebeldes Houthi. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha prometido represalias y ha advertido a Irán de las consecuencias, mientras que Irán ha prometido responder si es provocado. Estos acontecimientos mantienen el riesgo geopolítico elevado - y al oro le encanta el riesgo.

Sumando a la inestabilidad, el expresidente estadounidense Donald Trump sigue acaparando titulares. Durante el fin de semana, presentó un arancel del 100% sobre películas producidas en el extranjero e incluso planteó la idea de una posible acción militar para tomar control de Groenlandia. Los mercados, no sorprende, están inquietos por esta retórica impredecible, especialmente en momentos en que aumenta la incertidumbre sobre la dirección de la política económica de EE.UU.

La Fed mantiene firme la postura mientras los mercados se preparan para el impacto

Mientras los titulares internacionales dominan, la política interna también juega su papel. Trump ha criticado una vez más a la Reserva Federal de EE.UU. y a su presidente, Jerome Powell, calificándolo de “rígido” y exhortando al banco central a reducir las tasas de interés. Sin embargo, la Fed parece mantenerse firme por ahora. 

Según la herramienta FedWatch de CME, solo hay un 4.4% de probabilidad de un recorte de tasas en la reunión de esta semana.

Esta tensión continua entre la presión política y la cautela del banco central está dejando al dólar estadounidense contenido y restringiendo los rendimientos del Tesoro; ambos factores apoyan el precio del oro. A pesar de algunos datos económicos positivos, incluyendo un reporte de empleos en abril más fuerte de lo esperado y un aumento en la actividad del sector servicios de EE.UU., los mercados siguen inquietos.

De hecho, el índice Prices Paid del ISM se disparó a su nivel más alto desde febrero de 2023, lo que sugiere que las presiones inflacionarias pueden estar resurgiendo. Todo esto contribuye a un entorno en el que el oro puede prosperar. Técnicamente, el metal ha superado resistencias clave y ahora parece estar listo para probar niveles más altos. 

Un movimiento hacia $3,400 - o incluso $3,500 - no estaría fuera de cuestión si las tensiones geopolíticas se profundizan o si el dólar continúa debilitándose. Dicho esto, cualquier cambio inesperado por parte de la Fed o una desescalada súbita en los conflictos globales podría provocar una corrección. Por ahora, sin embargo, el impulso está a favor de los toros.

Bitcoin se enfría, pero la confianza institucional crece

Por supuesto, el oro no es el único refugio seguro en juego. Bitcoin, a menudo descrito como “oro digital”, está navegando su propia tormenta.

Después de recuperarse a principios de este mes, BTC se ha retirado a alrededor de $95,000, desde máximos recientes cerca de $97,700. Los datos on-chain sugieren que muchos inversores están asegurando ganancias, lo que contribuye a la reciente caída. Métricas como el Network Realised Profit/Loss de Santiment y la relación MVRV de Glassnode apuntan a una fase de consolidación, esta última cayendo a 1.74 - históricamente asociada con periodos de enfriamiento.

Aún así, el apetito institucional por Bitcoin parece intacto. Los ETFs de Bitcoin registraron entradas por $1.8 mil millones solo la semana pasada, continuando una racha de tres semanas que ha atraído $5.5 mil millones en total. Strategy, una firma centrada en Bitcoin, compró casi 1,900 BTC por $180 millones y elevó sus objetivos de rendimiento para 2025, mientras que Semler Scientific y Thumzup Media también aumentaron sus tenencias. Esta constante corriente de compras institucionales sugiere confianza en la trayectoria a largo plazo de Bitcoin, incluso cuando los inversores minoristas toman ganancias a corto plazo.

Entonces, ¿hasta dónde puede llegar el oro en esta ola de aversión al riesgo? Si las tendencias actuales persisten, el metal podría estar en camino de romper nuevos récords. Aunque el camino no estará exento de volatilidad, las fuerzas subyacentes: aumento de las tensiones globales, presión política sobre los bancos centrales e incertidumbre económica persistente, continúan favoreciendo al oro.

¿Y qué hay de Bitcoin? Puede estar tambaleándose, pero con grandes respaldos acumulándose, su próximo movimiento podría no estar lejos.

En un mundo donde la imprevisibilidad es la nueva normalidad, la silenciosa fortaleza del oro está haciendo mucho ruido.

Pronóstico del precio del oro 

Al momento de escribir, el oro ha superado los $3,300, con presión alcista evidente. Un reciente cruce alcista añade peso a la narrativa positiva, aunque las barras de volumen sugieren que la presión de compra podría estar desacelerándose. Si el movimiento al alza continúa, los precios podrían encontrar resistencia en los máximos históricos de $3,385 y $3,500.

Bitcoin, por otro lado, ha estado en modo de corrección, con presión de venta reciente visible en el gráfico diario. Las barras de volumen indican que el fuerte interés de compra persiste, aunque podría estar disminuyendo. Si los precios siguen bajando, podrían encontrar soporte en $93,000 y $80,000 en caso de un colapso. 

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