Elecciones 2024: ¿Qué valores podrían prosperar o hundirse tras los comicios?

Con las elecciones presidenciales estadounidenses a punto de celebrarse el 2 de noviembre, la pugna entre la vicepresidenta Kamala Harris y el ex presidente Donald Trump se está estrechando, lo que eleva la fiebre electoral a un nivel sin precedentes. El resultado podría tener implicaciones significativas para varios sectores de la economía, y los inversores se mantienen atentos a los valores que puedan verse influidos por el resultado. 

Desde los servicios financieros hasta la energía y los vehículos eléctricos (VE), valores como Bank of America, Microsoft, Rivian y Airbnb están preparados para un movimiento potencial. Pero antes de sumergirnos en estos valores individuales, es crucial entender cómo se ha comportado históricamente el mercado de valores durante los ciclos electorales.

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Comportamiento del mercado de valores durante las pasadas elecciones

Históricamente, las elecciones estadounidenses han tenido un profundo impacto en el mercado bursátil, con patrones que han ido surgiendo a lo largo de casi un siglo. Desde 1928, el S&P 500 ha predicho con exactitud el resultado de 20 de las 24 elecciones presidenciales estadounidenses. Este poder de predicción proviene de una tendencia según la cual, si el mercado sube en los tres meses previos al día de las elecciones, el partido en el poder tiende a ganar. 

Por el contrario, un mercado en declive suele señalar un cambio de poder. Por ejemplo, cuando el mercado de valores subió durante este periodo crítico, el partido en el poder conservó la Casa Blanca 12 de cada 15 veces. En el lado opuesto, el partido en el poder perdió 8 de las últimas 9 elecciones cuando el mercado estaba a la baja en los meses previos a la votación.

Fuente: LP Financial

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Actualmente, el mercado de valores ha mostrado un impulso positivo desde agosto, lo que, históricamente, podría sugerir una continuación de las políticas de la actual administración. Sin embargo, con Joe Biden renunciando a un segundo mandato y Kamala Harris encabezando la candidatura demócrata, estas elecciones introducen incertidumbres únicas.

El reputado inversor Stan Druckenmiller señaló recientemente que el mercado parece estar poniendo en precio una posible victoria de Trump, lo que podría provocar importantes movimientos sectoriales. Las observaciones de Druckenmiller reflejan un sentimiento más amplio de que, aunque los mercados bursátiles tienden a reaccionar a corto plazo a los resultados políticos, el rendimiento a largo plazo está más ligado a tendencias económicas más amplias como la inflación, las políticas fiscales y la confianza de los consumidores.

El impacto inmediato de las elecciones es innegable; sin embargo, es crucial tener en cuenta que los datos históricos sugieren que los rendimientos del mercado a medio y largo plazo están más influidos por factores macroeconómicos que por los resultados electorales.

Un gobierno dividido -donde un partido controla la presidencia y el otro el Congreso- ha conducido históricamente a un mejor rendimiento del mercado de valores que el control de un solo partido. Por ello, los inversores deben centrarse no sólo en quién gane la presidencia, sino también en la composición del Congreso y en cómo podría afectar a la aplicación de las políticas.

Sectores y valores clave a vigilar

Servicios financieros: Bank of America (BAC)

El sector financiero es una de las áreas clave que podría ver impactos significativos en función del resultado de las elecciones. Una victoria de Trump puede ser señal de una continuación de la desregulación, beneficiando potencialmente a grandes instituciones financieras como Bank of America. El primer mandato de Trump vio un retroceso de varias regulaciones Dodd-Frank, que permitieron a los bancos ampliar sus operaciones y aumentar sus beneficios.

Otro beneficiario del entorno normativo empresarial más laxo que se espera que fomente Trump es el sector financiero, incluida la banca y otras instituciones financieras. Los banqueros esperan que las estrictas normas que está formulando la administración Biden se suavicen o incluso se retiren, y un analista espera "normas de capital menos estrictas". Esto podría crear un entorno más favorable para gigantes financieros como Bank of America, permitiéndoles crecer y asumir más riesgos.

Sin embargo, incluso bajo una presidencia de Harris, es probable que el sector financiero siga siendo fuerte, sobre todo con las crecientes preocupaciones bipartidistas en torno a la inflación, los tipos de interés y los préstamos al consumo. Bank of America, como uno de los mayores bancos de EE.UU., está bien posicionado para beneficiarse de cualquiera de las dos administraciones, lo que lo convierte en un valor que los inversores deberían seguir de cerca a medida que se acercan las elecciones.

Tecnología y ciberseguridad: Microsoft (MSFT)

Microsoft es otra empresa que obtendrá buenos resultados independientemente del resultado de las elecciones. Tanto Harris como el Partido Republicano han hecho hincapié en la importancia de la ciberseguridad, siendo Harris una defensora desde hace tiempo del refuerzo de las infraestructuras informáticas contra las ciberamenazas. La plataforma del Partido Republicano también incluye un enfoque en la ciberseguridad, en línea con la creciente preocupación por la ciberdefensa.

Microsoft, líder tanto en IA como en ciberseguridad, está posicionada para beneficiarse de este enfoque bipartidista. Como segundo mayor proveedor de servicios en la nube, Microsoft ha integrado la IA en su paquete de productos de software y también ofrece soluciones integrales de ciberseguridad. Dada la importancia de la IA tanto en el sector empresarial como en el gubernamental, las perspectivas de crecimiento de Microsoft siguen siendo sólidas, independientemente del partido que ocupe la Casa Blanca.

Acciones EV: Rivian Automotive (RIVN) y Tesla (TSLA)

El sector de los vehículos eléctricos (VE) es uno de los principales focos de atención en estas elecciones, especialmente bajo el mandato de Harris, que ha continuado el apoyo de Biden a las políticas a favor de los VE. Harris ha defendido incentivos federales como el crédito fiscal de 7.500 dólares para VE, junto con miles de millones de dólares en subvenciones para construir una red nacional de recarga. Estas políticas benefician directamente a empresas como Rivian Automotive, que produce la camioneta R1T, el todoterreno R1S y las furgonetas de reparto para Amazon, así como a Tesla, cuyo liderazgo en el espacio de los vehículos eléctricos le permite sacar provecho de estos incentivos.

A pesar de que Elon Musk apoya a Trump, una victoria de Kamala Harris podría en realidad impulsar a Tesla, gracias a su énfasis en las energías renovables y la expansión de los vehículos eléctricos. De hecho, la campaña de Harris tiene previsto reunirse con propietarios de Tesla en una llamada Zoom el 2 de noviembre, destacando su alineamiento con las políticas pro-EV.

Rivian también ha cosechado críticas positivas de los analistas, con una calificación de "Comprar" de consenso y optimismo sobre su crecimiento futuro. Las mejoras de Rivian en la producción y las asociaciones estratégicas, como la inversión de 5.000 millones de dólares de Volkswagen, consolidan aún más su posición en el mercado de los vehículos eléctricos. Tanto si Harris continúa con las políticas de Biden como si Trump cambia el mercado hacia un enfoque energético más tradicional, tanto Rivian como Tesla siguen siendo valores fuertes a los que prestar atención.

Viajes y turismo: Airbnb (ABNB)

Airbnb es otro valor a tener en cuenta a medida que se acercan las elecciones. Algunos analistas predicen que una victoria de Trump podría provocar un aumento de la confianza de los consumidores y de los viajes, lo que beneficiaría a Airbnb. La empresa ya ha demostrado rentabilidad y resistencia en el sector de los viajes y podría experimentar un mayor crecimiento a medida que la demanda de viajes se recupere tras la pandemia.

Independientemente de quién gane las elecciones, la eficacia operativa de Airbnb y sus positivos resultados financieros la convierten en una opción sólida para los inversores que buscan capitalizar la recuperación del sector de los viajes y el turismo.

Opiniones de expertos y el camino por recorrer

A medida que se acercan las elecciones en EE.UU., los expertos del mercado subrayan que, aunque los resultados políticos pueden influir en sectores específicos, el rendimiento de las acciones a largo plazo está impulsado principalmente por tendencias económicas más amplias como la inflación, los tipos de interés y las políticas fiscales. Los inversores deben vigilar de cerca estos factores macroeconómicos al tiempo que supervisan los valores individuales que podrían verse afectados por las elecciones.

Para aquellos que buscan navegar por el mercado postelectoral, los valores analizados -Bank of America, Microsoft, Rivian y Airbnb- ofrecen un fuerte potencial de crecimiento. Tanto si gana Harris como si lo hace Trump, estas empresas están preparadas para beneficiarse de las tendencias actuales en defensa, tecnología, energía y viajes de los consumidores.

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